Este espacio fue concebido mientras pasaba largas horas escribiendo con pasión, pensamientos que fluían como ríos de tinta,; fruto de sentimientos y nostalgia.
Su único propósito fue siempre el de expresar a través de líneas escritas con el corazón, sentimientos que amenazaban con desbordarse.
Al paso del tiempo, el arrebato que inspiró esto, dejó de ser protagonista principal, pero jamás dejó de ser mi razón de escribir.
Con los años, mi mente me sigue llevando hacía él.
Y es por ello que mis letras siempre llevarán en el fondo de su orígen, una huella que representa mi amor hacía esa primigenia inspiración.
Más la vida sigue, otros apegos están por manifestarse, y se abren paso otros lugares donde depositar el corazón, donde plantar las ilusiones, donde ver crecer la esperanza.
Del ayer, del ahora, y tal vez del mañana continuaré hablando...
Este es mi espacio: eternamente en construcción, sin un plan maestro y estás mis crónicas...




Mostrando entradas con la etiqueta vivencias. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta vivencias. Mostrar todas las entradas

sábado, febrero 14, 2015

Sólo por está noche

CRÓNICAS DE UNA MENTE DAÑADABRUJA


Sólo por hoy, sólo por esta noche quiero vivir en ti, mientras tú me evoques.
Y quiero que estés conmigo mientras no despierte.
Tan sólo quiero que permanezcamos asidos, sin más tiempo que el momento, y sin más futuro que el mismo tiempo.
Por que sé que sí despierto te escurrirás entre mis dedos y sabré que te convertirás en pasado y me niego a volverte recuerdo.
Por un frágil instante deseo que vivas en mi, mientras sueño: oculto y oscuro deseo.
Sólo está noche... sólo por un breve momento.
(Nicotina)

"Quizás debería aceptar que ya fue. Qué no fuimos, qué no somos, y no vamos a ser..."


montse_rocco@hotmail.com

sábado, noviembre 01, 2014

Día de muertos en Naolínco Veracruz

CRÓNICAS DE UNA MENTE DAÑADABRUJA

Naolinco, un lindo pueblo situado entre montañas a media hora de Xalapa, es uno de esos lugares que aún conserva su magia. Sus calles, su gente y ambiente tienen ese fresco sabor que encanta a las personas que lo visitan. Entre sus tradiciones están las "cantadas" en el día de muertos, las personas van a los altares o tumbas y cantan a sus difuntos.

Esta ciudad sobresale por sus bellísimas artesanías, que han ganado premios nacionales, como por ejemplo sus magníficas máscaras talladas en madera, su cerámica y sus artículos de piel.


Naolinco corazón espiritual de Veracruz Tomando la carretera federal  140, a 30 kilómetros de Xalapa y a 1,540 metros sobre el nivel del mar se encuentra la ciudad de Naolinco de Victoria, sobre las estribaciones de la Sierra de Chiconquiaco, con origen totonaca. Su antiguo nombre fue Tatimolo que significaba "la tierra del pájaro cardenal". Después de la conquista, Tatimolo cambia de nombre y se le asigna "Naolinco", ya que en lengua Náhuatl significa "Lugar de los Cuatro Movimientos del sol", posiblemente en referencia a las cuatro estaciones del año y también como a un probable centro ceremonial de adoración del sol. En la actualidad es una ciudad muy pintoresca con calles empedradas, casas coloniales con fachadas en colores pasteles y balcones que le dan un toque de nostalgia, creando en el visitante la sensación de estar en otra época. El uso de la madera en el tallado de máscaras para celebrar las fiestas de San Mateo Apóstol con la Danza de Santiagos, es una de las manifestaciones artesanales muy apreciada. La elaboración de zapatos y artículos de piel contribuye al desarrollo económico de la ciudad y de las familias dedicadas por décadas a esta industria.

Naolinco comparte sus celebraciones con propios y extraños. Los alabados y alabanzas, altares monumentales, exposiciones plásticas alusivas al tema, todo se conjuga de una manera única para hacer de Naolinco una visita imprescindible. Los que llegan se incorporan al ritual de la Cantada, que tiene lugar la noche del primero de noviembre y que se desarrolla a lo largo de las horas de la madrugada del dos de noviembre. Las familias mantienen las puertas de sus casas abiertas, acogiendo a quienes ofrecen los cánticos de sus oraciones al pie del altar, rindiendo homenaje a la vida de sus seres queridos. Similar a los demás pobladores de la región, los naolinqueños desarrollan un elaborado ritual de hermosos altares y visitas al cementerio, entre el 30 de octubre y el 2 de noviembre. Los elaborados altares, que por sus diseños son obras de arte son el centro de la actividad en el hogar donde las almas llegan a disfrutar del aroma de los alimentos y la imagen de los objetos que en vida les pertenecieron o de los que se elaboran estrictamente para la ocasión.

 Preparativos: Las familias se preparan con dos semanas de anticipación confeccionando las flores, cortando el papel de china y reuniendo los ingredientes para los platillos de la ofrenda, sin olvidar la preparación de los vinos de uva, piña, tamarindo y mora que no pueden faltar en la ofrenda.

En varias intersecciones de las calles del centro de la ciudad, se levantan hermosos arcos, igualmente adornados con plantas ornamentales y cempasúchitl que van de una esquina a la otra. En muchas de las casas se colocan arcos bellamente decorados sobre las puertas, indicando de esta manera a los grupos que cantan los alabados y alabanzas que en ese hogar serán muy bien recibidos.

Altares de Todos Santos o Altares de Vida: Los altares naolinqueños son profundamente cristianos. Se hacen en forma de graderías para colocar en lo más alto las imágenes más veneradas como las de Jesucristo, la Cruz cristiana, la Virgen del Carmen y la foto de los familiares fallecidos. En la construcción de estos altares dedicados a la vida, participa toda la familia con tareas asignadas, consiguiendo de esta forma que cada uno de los que interviene dé lo mejor de sí mismo.

El altar se caracteriza por uno o varios arcos de carrizo u otate que se adorna con tepejilote (una planta de ornato, con hojas de tamaño mediano de un color verde intenso)Repartidas en espacios cortos se añaden al arco ramilletes de la flor de cempasútchil. También se observa el uso de rectángulos en lugar del arco tradicional, decorado con frutas que penden como naranjas, berenjenas, a la vez que canastitas decoradas con papel de china de diferentes colores; tanto el arco como el rectángulo enmarcan la mesa sobre la que se coloca la ofrenda. La mesa es cubierta con manteles o telas blancas y papel de china picado en diseños originales que se mantienen en todo el arreglo. Se colocan las velas, veladoras y ofrendas de frutas, dulces, elaborados a base de pepita, jamoncillo, guayabates, calabaza amelcochada, camotes en almíbar, etc.

El pan de muerto es un elemento importante en la ofrenda. Los sabores de su preparación es variado: a base de huevo, de manteca, de sal, de granillo, mantequilla, además de los buñuelos y galletas de toda clase. Los tamales que se guisan son de pipían, carne de cerdo, fríjol, adobados de carne de cerdo y de pollo.
La gastronomía de Naolinco está considerada como la más rica del centro de Veracruz y en esta noche las almas disfrutan de su aroma y los vivos de su delicioso sabor. Como un aspecto esencialmente naolinqueño en la elaboración de los altares, es el uso del papel de china cortado y colgado en un círculo del techo sobre el altar, como un marco suspendido en el aire.

Lo característico de este papel es que el diseño de los cortes es el mismo en todos y que los colores están perfectamente compaginados.
El papel de china también se utiliza para cubrir las paredes alrededor del altar, creando un fondo multicolor o en círculos sobre la pared del fondo y en el centro una imagen religiosa grande, en bulto.

Las familias pasan largas horas trabajando en el altar, muchos de estos altares son considerados verdaderas obras de arte, ya que reflejan el trabajo, dedicación y creatividad de la gente. Son realizados según la tradición, donde se establece que el altar debe de constar de 7 niveles o escalones que representan los 7 niveles que tiene que pasar el alma de un muerto para poder descansar.
Estos altares se realizan generalmente en lugares donde exista un espacio grande donde pueda caber todo el altar, el cual debe ser barrido el cuarto con hierbas aromáticas hacia los cuatro vientos un día antes del día de muertos. Primero se construye o fabrica el esqueleto del altar ya sea con cajas de cartón, madera o lo que se encuentre a fin de que queden bien cimentados los 7 niveles, de los cuales el séptimo debe de estar casi a la altura del suelo y sobre él se pone el segundo nivel que es un poco más chico que el primero y así sucesivamente hasta llegar al primer nivel, cada escalón es forrado con tela negra y blanca.

Cada escalón tiene un significado y debe contener ciertos objetos en específico:
1er. escalón se pone la foto del santo o virgen de la devoción.
2o. escalón es para las ánimas del purgatorio.
3er. escalón se pone la sal para los niños del purgatorio.
4o. escalón se pone pan llamado "pan de muerto", este pan es adornado con azúcar roja que simula la sangre, se recomienda que el pan sea hecho por los parientes del difunto, ya que es una consagración.
5o. escalón se pone la comida y la fruta que fueron los preferidos por el difunto.
6o. escalón se pone la foto del difunto a quien se dedica el altar.
7o. escalón se pone la cruz de un rosario hecho de tejocote y limas.

Las ofrendas que se ponen dentro del altar son las siguientes:
Se prenden cuatro velas principales formando una cruz orientada a los cuatro puntos cardinales, al lado del altar, se pone una olla de barro sobre un anafre con hierbas aromáticas: albahaca, laurel, romero, manzanilla y otras más.
Los elementos que debe tener un altar son:
Cadenas de papel morado y amarillo que significan la unión entre la vida y la muerte.
Papel picado que da colorido y alegría de vivir.
Las flores son la bienvenida para el alma, la flor blanca representa el cielo; la flor amarilla, la tierra y la morada el luto.
Velas que con sus llamas representan la ascensión del espíritu. También significan luz, guía del camino.
Lienzo blanco y nuevo que representa la pureza, el cielo.
El cirio representa el alma sola.
Incienso de copal cuyo humo simboliza el paso de la vida a la muerte.
El maíz representa la cosecha.
Las frutas son la ofrenda que nos brinda la naturaleza. Generalmente son cañas de azúcar, naranjas, tejocotes y jícamas.
Las calaveras de azúcar que son una costumbre indígena.
El agua que da vida y energía para el camino.
Los platillos con las que se trata de agradar el difunto compartiendo los alimentos que le gustaban.
Fotografía de la persona a quien se dedica el tributo.
Un Cristo para que haya bendiciones.
Una cruz de cal que simboliza los 4 puntos cardinales.
Sal para que el cuerpo no se corrompa.
Un camino desde la puerta de la entrada hasta el altar formado con flor de cempasúchil.
Una vara para liberar al muerto del demonio y los malos espíritus
Y por último los objetos personales del difunto.
En algunos altares el uso de cráneos hace alusión a nuestro pasado prehispánico.

Los Cuadros de Catrinas: Son figuras de catrinas hechas de papel maché y es tradicional que adornen la entrada de los centros culturales y restaurantes.


Origen de los Alabados y Alabanzas: Posiblemente a partir de 1542, los frailes franciscanos se establecen en el entonces pueblo de Xallapan – hoy Xalapa, la capital del estado de Veracruz – donde construyen el convento de San Francisco, desarrollando desde allí la evangelización de los pueblos aledaños, entre los que se encontraba Naulingo de su Majestad.
Los alabados son composiciones religiosas que durante la época de la Colonia eran entonados por los trabajadores del campo a la hora de la "caída del sol"

Las alabanzas son igualmente muy antiguas y su origen es de tipo romance, de ellas emanan los cantos llamados "caminatas" que se entonaban en las procesiones religiosas. Con el paso del tiempo se derivan los "corridos"
En cuanto a los alabados y alabanzas, fueron transmitidos desde los centros religiosos a los indígenas y se comienzan a cantar durante los días dedicados a celebrar a Todos los Santos y los Fieles Difuntos.

La Cantada: El primero de noviembre, alrededor de las ocho de la noche da inicio "la cantada" que consiste en visitar las casas donde se han elaborado los altares y entonar allí los cantos (alabados y alabanzas), creaciones de los habitantes de Naolinco, que son dedicadas a santos, mártires y a personas relacionadas con la religión. Se inicia cuando los grupos se dirigen al cementerio a cantar frente a la tumba de un pariente la primera "cantada" de la noche, luego los participantes se desplazan de casa en casa entonándolos respetuosamente.

Como muestra de agradecimiento los dueños de las viviendas ofrecen una copa de vino de fruta y los platillos preparados para la ocasión.
Por las calles se cruzan niños, jóvenes y adultos alternando la visita a las diferentes casas.
Es un ir y venir que concluye a tempranas horas de la madrugada, ya que es necesario descansar para continuar al día siguiente con la visita al camposanto.

Visita al cementerio: En vida se ama y en la muerte se recuerda y el dos de noviembre los pobladores de Naolinco se encaminan hacia el cementerio llevando coronas y flores (naturales y artificiales), velas y veladoras que colocan sobre las tumbas, que previamente han sido limpiadas.
Familias enteras en las que no faltan los niños desfilan por la puerta principal camino hacia la tumba de sus seres queridos. A mano derecha, ingresando al cementerio se encuentran tumbas y mausoleos de hace más de un siglo, en las que una mano generosa deposita una flor en homenaje a ese personaje anónimo que vivió y contribuyó al desarrollo en Naolinco.
Pequeños mausoleos con ángeles hermosamente tallados, en el centro de pequeñísimas capillas abiertas, forman parte de este legado.

En la parte más nueva del camposanto, algunas de las tumbas están elaboradas de tal manera que parecen una pequeña habitación. En algunos casos representan una salita con una mesa hermosamente cubierta con manteles tejidos en crochet, en el centro cuelga una cruz y a sus pies la foto del o la fallecida, en algunos esposos. Llena de flores de diferentes colores, la "habitación" invita a detenerse para observar cada detalle. El objetivo de los familiares es crear en este espacio pequeño un sentimiento del estilo hogareño, que posiblemente tuvieron en vida aquellas personas. Sólo la pared del fondo está construida completamente de ladrillo y cemento, las laterales y la del frente tienen amplios ventanales de vidrio, lo que facilita el poder observar cada detalle creado con amor.
En otra "habitación" dedicada a un deportista permanece su camisa del equipo de béisbol en el que jugaba.
Los bloques "habitacionales" pintados en tonos pasteles y colores fuertes, se ven llenos de flores de diferentes colores, creando un conjunto alegre y nostálgico a la vez.

No faltan estudiantes de los centros educativos y culturales, convertidos en hermosas parejas de catrines, vestidos a la usanza del siglo XIX, que se deslizan etéreamente por el cementerio. Tanto niños como adultos buscan el momento para tomarse una fotografía con ellos, que seguramente luego guardarán, como un recuerdo de este día en el que la vida y la muerte se viven casi como una misma realidad.

Día de los Muertos en Naolinco es una fiesta dedicada al recuerdo, a la vez que es una oportunidad para que las expresiones artísticas de sus habitantes sean manifestadas


montse_rocco@hotmail.com

Fuente: La información es reproducida del Folleto titulado “Naolinco Cuna de Tradiciones”, publicado por el H. Ayuntamiento de Naolinco, la Secretaría de Turismo y la Casa de la Cultura.
Algunos textos y fotos son de Mary J Andrade

jueves, septiembre 18, 2014

Hay veces...

CRÓNICAS DE UNA MENTE DAÑADABRUJA

Hay veces que no te merezco…
Hay veces que no entiendo por que hago lo que hago y digo lo que pienso.
No comprendo que es lo que amas de mi.

¿Qué necesitas que yo tengo?.
¿Qué puedes encontrar en mi?.
¿Qué absurda solución te ofrezco?.
¿Será acaso que gustas del laberinto en el que te meto?.
¿Será acaso que simplemente no entiendo?.

A veces siento que no me mereces…
A veces creo que tan sólo proyecto.
A veces siento que no te merezco…


Autor: Nicotina

montse_rocco@hotmail.com

miércoles, agosto 27, 2014

Un café nunca más será sólo un café

CRÓNICAS DE UNA MENTE DAÑADABRUJA




¿Recuerdas todo aquello que recuerdo? 
Todo aquello que sé. 
Todo aquello que tú deseas olvidar.
¿Lo recuerdas?...

El día que un café se volvió más que sólo una taza de elixir compartido.
El día que un café se volvió tiempo para soñar,  ficción y realidad.
El día que un café se volvió suspiros exhalados al viento, momentos únicos, irrepetibles. Secretos confesados que ahí se quedaron con los posos del café

La noche que el aroma del café nos envolvió, nos sedujo. Y nos bebimos el uno al otro.
La noche que el aroma del café nos provocó probarnos, degustarnos y quemarnos lento los labios.
La noche que el aroma del grano, nos hizo adictos al deseo. Sabíamos que podríamos quemarnos, pero aún así corrimos el riesgo, bebimos gustosos el dulce y a la vez amargo sabor de la temporalidad, de la certidumbre, del saber que un sólo café nunca más nos dejaría satisfechos. Una vez que se prueba hay un deseo insaciable por seguirlo bebiendo. 

El día que un café se volvió risas y tristezas. Vivencias y recuerdos.
El día que un café se volvió música que nos envolvía mientras nos mirábamos a los ojos. Y esa misma canción me la susurrabas al oído porque sabías cuanto me gustaba.
El día que un café se volvió silencios que apenas duraban segundos; de esos que lo dicen todo y a la vez nada.
El día que un café se volvió premura por sumergirnos en la oscura vorágine agitada por nuestras cucharas.

Tal vez nos bebimos demasiado rápido. 
Tal vez nos bebimos demasiado lento.
Tal vez fuimos como una taza de expresso: breve pero intenso.

Cada uno tuvo sus motivos, sus razones, no lo sé…   

Pero está claro que un café no es sólo un café... 
A pesar del miedo a quemarme. Sé que necesito del café y me encanta necesitarlo.  
No podría rechazar una invitación a tomarlo. 
Rechazar un café es rechazar una oportunidad de charlar o algo más.
Rechazar un café es perder la posibilidad de sumergirnos en los posos, en las largas y profundas miradas que devienen una vez consumado el deseo.

Un café nunca más será sólo un café...
La próxima vez que escuches la frase insinuante e invitadora: “venga; sólo es un café Te apostaría que dejarás pasar el inaudible “nunca” que va delante, el que lo dice todo y a la vez nada, el “nunca” de arriesgarlo todo a una mano, a un instante, a un momento… a un café.

(Porque nunca volveremos a saborear un café del mismo modo)


LAS HOJAS MUERTAS  
Cuánto me gustaría que te acordaras 
de los felices días de cuando éramos amigos 
En aquel tiempo la vida era más bella 
y el sol más abrasador que ahora 
Las hojas muertas se juntan a montones... 
Los recuerdos y las añoranzas también 
y el viento del norte se los llevaba 
en la noche fría del olvido 
No he olvidado la canción 
que tú me cantabas 
Es una canción que nos une 
Tú me amabas 
y yo te amaba 
y vivíamos los dos juntos 
tú que me amabas y yo que te amaba. 
Pero la vida separa a los que se aman 
muy despacio 
sin hacer ruido 
y el mar borra en la arena 
los pasos de los amantes separados 
Las hojas muertas se juntan a montones... 
los recuerdos y las añoranzas también 
Pero mi amor callado y fiel 
siempre sonríe y da gracias a la vida. 
Te amaba tanto, eras tan hermoso 
Cómo quieres que te olvide...
Tú eras mi dulce amigo... 
Pero no tengo que tener recuerdos tristes 



montse_rocco@hotmail.com

sábado, julio 12, 2014

Café con sabor a ayer

CRÓNICAS DE UNA MENTE DAÑADABRUJA


Llueve de una manera copiosa allá afuera, tal vez como un reflejo de mis lágrimas reprimidas hasta el momento y por orgullo bien disimuladas, quisiese levantarme y gritarle unas cuantas verdades, pero mantengo la fría e indolente máscara.

Nos encontramos en nuestro lugar, donde antaño compartimos, risas, besos, cigarros y humeantes cafés.
La pequeña cafetería se encuentra en un barrio antiguo de la ciudad, donde se percibe un olor a romanticismo, a nostalgia y a noches perfumadas de jazmín y gardenias. Por eso me gustaba tanto frecuentarlo.
Los vecinos hicieron a bien poner macetas en los alfeizares de sus ventanas con sendas plantas y flores que impregnan las callejuelas e invitan a recorrerlas tomados de la mano y escurridizos entre sus pórticos besarnos, dando paso a nuestras reprimidas ansías y luego riéndonos de nuestra travesura, entrar al pequeño local de café a seguir compartiendo charlas interminables, degustando algún postrecillo con nuestras tazas, cigarros y libros. Si hiciera un recuento de las noches que compartimos en ese lugar, podría escribir un libro o tal vez echarme a llorar en este instante.

El silencio se hace cada vez más denso, seguimos aquí sentados, en esta pequeña mesa de madera junto al ventanal, que veladamente nos protege de miradas del exterior por esas hermosas cortinas finamente tejidas; que la dueña del lugar orgullosamente nos relató pertenecieron a su bisabuela y fueron un regalo de bodas.  
Enciendo un cigarrillo. Él, con una taza de irlandés en la mano, dándole vueltas, se le nota incómodo, tal vez quisiese estar en otro lugar. Absorta contemplo mis volutas de humo como se disipan, así como en este momento veo escurrirse entre mis dedos estás ilusiones que de antemano nunca debí albergar.
Ensimismada observo mi capuccino sin estar segura de hacer esa pregunta. Pero uno de los dos debe hacerla, sin más preámbulos la suelto.

- ¿Estás seguro de está decisión que has tomado?

- Sí, he tenido momentos de dudas, pero hoy sé que no he estado más seguro de nada en toda mi vida.

- ¿Y qué sucederá después? Quizás te arrepientas, ¿Qué va a ser de nosotros?

- Para mí no hay un “después”, nunca hubo un “nosotros” y eso tú lo sabías.

- No sé cómo puedes pretender echar de tu vida a una persona así tan fácil, y no quiero caer en chantajes emocionales, sabes que no soy así, pero ahora te veo tan absolutamente egoísta, solamente viendo tu conveniencia y este momento has decidido que yo, ya no te convengo o encajo en tus planes.

- No pido  que lo entiendas, ni siquiera que me comprendas, solo que lo aceptes.

 Con esta última frase, se incorporó, busco en su cartera, arrojo unos billetes en la mesa, y salió por la puerta, dejando como único recuerdo esos dos billetes para pagar aquel café. Su silueta se difumino entre la lluvia.

Nunca un capuccino había tenido un gusto tan amargo. En mis labios quedó un ligero sabor entre dolor y odio mezclado con unas gotas agridulces de melancolía.

Espere unos minutos, que a mí se me antojaron horas, tome su taza de café sin terminar y pose mis labios donde instantes antes había posado los suyos. A mi manera era un beso de despedida. Apure el amargo trago... Lo acepto, no lo comprendo, pero lo acepto. Ve, ¡sé feliz!

Imite su gesto, me levante, tome mi abrigo y puse otros dos billetes, junto a los suyos.


"Fuimos eso que no se cuenta, ni se admite. Pero nunca se olvida"

montse_rocco@hotmail.com

martes, mayo 06, 2014

No te enamores...

CRÓNICAS DE UNA MENTE DAÑADABRUJA



"No te enamores de una mujer que lee, de una mujer que siente demasiado, de una mujer que escribe.
No te enamores de una mujer culta, maga, delirante, loca.
No te enamores de una mujer que piensa, que sabe lo que sabe y además sabe volar; una mujer segura de sí misma.

No te enamores de una mujer que se ríe o llora haciendo el amor, que sabe convertir en espíritu su carne; y mucho menos de una que ame la poesía (esas son las más peligrosas), o que se quede media hora contemplando una pintura y no sepa vivir sin la música.

No te enamores de una mujer a la que le interese la política y que sea rebelde y sienta un inmenso horror por las injusticias. Una que no le guste para nada ver televisión. Ni de una mujer que es bella sin importar las características de su cara y de su cuerpo.

No te enamores de una mujer intensa, lúdica, lúcida e irreverente.
No quieras enamorarte de una mujer así. Porque cuando te enamoras de una mujer como esa, se quede ella contigo o no, te ame ella o no, de ella, de una mujer así, jamás se regresa..."

Martha Rivera Garrido, poeta dominicana.


montse_rocco@hotmail.com

martes, diciembre 31, 2013

Coincidencias

CRÓNICAS DE UNA MENTE DAÑADABRUJA



Y para cerrar este año 2013, mi último blog, que lo disfruteís ...

Camine sin rumbo fijo, horas atrás, sin plan, sin ruta programada, algo raro me sucede. Siempre  planeo todo cuanto hago, así que esto, es novedoso y un tanto apremiante para mí siempre organizada vida. La impaciencia, la incertidumbre atenazan. Pero siempre me repito es bueno romper esquemas y paradigmas. Aunque esto sólo lo hago por mi espíritu contestatario y provocativo.

Termine no sé cómo, en una bulliciosa y atestada plaza de el centro histórico de X ciudad; puede ser la tuya, la que sea, tú ponle nombre; todas son iguales, atestadas de gente contemplativa. Algarabía, risas, llantos, gritos, niños corriendo, un músico en una esquina intentando cautivar a los insensibles paseantes, un organillo que da vueltas gimiendo su nostalgia.

¿Les he contado cuanto me gusta contemplar esos cuadros vivos y pintorescos que interpretan las personas a mí alrededor?
Familias sonrientes comprando cualquier cosa, olvidando por un instante sus particulares problemas, risas cantarinas, estruendosas o chillonas dependiendo el infante ya sea complacido o no, en su particular capricho deseado.

Me deleito un rato observando lentamente, mientras camino y le doy una larga calada a mi cigarrillo, ¿les he dicho también que ese es otro de mis grandes placeres? ¿No? No, aún no les comparto mucho…
Observo a través del humo una banca; esa banca llama poderosamente mi atención, pero no es una banca cualquiera, está banca esta apartada, olvidada, casi escondida en una solitaria esquina, en el lugar menos concurrido de la gran plaza atestada, pareciese como si hasta con culpa o desprecio la hubiesen apartado a propósito, de ser colocada en un lugar más privilegiado, como para que no pueda ser admirada, como queriendo quitarle protagonismo o sólo para que la descubran ojos conocedores, ¿tal vez?

¡No lo entiendo! si una obra de arte de esa magnitud, de una autora tan afamada no se le da el sitio de honor dentro de una gran plaza, que nos podemos esperar o siquiera quejarnos de que nuestro nivel cultural este tan desestimado.

Sigo caminando, ejerce una fascinación en mí. Es como si me susurrase  que me acerque y  la acaricie, pero la banca recibe a una pareja sentada en uno de sus extremos que comparten sonrisas y algo más. Mientras le caen los rayos de sol y el ajetreo citadino se da un respiro. Las figuras misteriosas de bronce se convierten en guardaespaldas encapuchados, voyeurs metálicos.
Así que esperare un poco, camino por la solitaria calle no hay prisas, no hay planes. Recuérdalo, ¡al diablo por hoy los planes!. Esperare paciente hasta que esos enamorados se larguen de ahí.

Me entretengo observando las fachadas de esas casonas antiguas barrocas que invariablemente encontrarás en cualquier centro histórico de antiguas ciudades coloniales. Los balcones particularmente son el centro de mi atención; las curiosas formas que la forja de esos artistas del metal, el fuego y el marro que a base de golpes crearon. Belleza tan indescriptible, delicada e incomparable que no todos se detienen a mirar.
¿Es acaso que siempre hay que aplicar presión, dolor, dureza, para descubrir la belleza escondida en todas las cosas?
Al final de esa calle hay un museo escondido, un llamativo cartel me invita a pasar, es una pequeña exposición fotográfica, titulada "Freak-a-dos: Crónicas siamesas" pues veamos que nos depara dentro...

Un lugar pequeño, pero bien distribuido, una serie de arte-objetos, esculturas, fotografías, me dan la bienvenida, ha pasado ya unos meses desde que no entraba a un museo, y me arrepiento por dejar de lado ese tipo de actividades, tal vez culpo a la carencia de una buena compañía que disfrute y pueda estar a la altura, sólo me he rodeado de frívolas mujeres que desean copas en los bares de moda, ser vistas en el restaurante donde todas sus amigas van y terminar siendo folladas en el hotel más caro y extravagante, no las culpo lo valen, sus encantos bien han valido mi inversión, pero ¿pensar en ellas para llevarlas a un museo? ¿Intercambiar impresiones sobre una buena puesta en escena o un libro? No, jamás, sus exquisitas cabecitas huecas me puedo imaginar en qué posición las prefiero tener.

Camino entre fotografías y composiciones extrañas, instalación y performance, no entiendo del todo esa fascinación que hoy en día atrae hacia el arte-objeto,  pero la temática es lo que llama mi atención: “los freaks”
Ese tipo de personas que no encajan en los moldes establecidos, aquellos que gustan de nadar contra corriente, y en su búsqueda van encontrando otros como ellos, nunca iguales pues cada uno maneja su rareza como su sello distintivo pero se complementan, la parte melliza que buscamos pero que aquí se revela en una persona diametralmente opuesta, pero de esa extraña simbiosis, surge algo que nos hace sentirnos como parte de un “nosotros”, y no somos ni seremos nosotros, somos tu y yo, individuales, y extraños, peculiares y freaks,  pero de nuestras particularidades creamos y formamos un todo que por ese  breve espacio de tiempo nos unirá  aun cuando el "por siempre juntos" no exista.
Pienso más de lo que puedo expresar.

La exposición está montada en 3 niveles: infierno, purgatorio y paraíso, haciendo referencia a Dante. Hago algunas anotaciones, hay frases pintadas en las paredes a manera de collage acompañando las fotografías, algunas resuenan y hacen eco en mi  interior, como si fuesen escritas para mi. Continuo por las salas, subo otro nivel, y más fotografías, más objetos raros; pero mi atención sigue distrayéndose hacía la banca que está afuera. Me asomo por uno de los ventanales, espío a los intrusos. Hay gente tomándose fotos en la banca, eso me da esperanzas,  tal vez se levanten  para dejar  que las personas se tomen sus fotos más cómodamente, ¡pero no! Ni se inmutan y siguen charlando, ella sólo se acerca más a él, dejando más espacio para los turistas que desean llevarse un recuerdo en fotografía, ¡demonios! ¡maldición!  Tantas bancas y tenían que escoger precisamente esa.

Termino de ver la exposición de forma precipitada, ya no hay más que me interese en esas salas. Salgo decidido a sentarme en esa banca y corroborar la autoría; me importa un demonio si ellos siguen ahí, tal vez hasta logre incomodarlos y se larguen. Sí eso haré.

Cruzo la acera y me siento en el extremo de la banca, es bastante larga, alojaría comodamente a siete u ocho personas en ella. Paso mi mano por ella, como si acariciase a una mujer, tan fría, tan fuerte, áspera y de textura rugosa. Las figuras a mis espaldas: Seis magos, sirven de respaldo, seres expectrantes, dolorosos y tristes.¡Oh Leonora! ¿Cómo tus visiones fantásticas y oníricas las reflejas tan fielmente a través de tus obras?

Me voltean a ver, notaron la caricia prodigada a esta bella obra de arte,  probablemente ni siquiera saben en que están sentados, cruzo una mirada fugaz con ellos, pero ella continua con su relato, el sólo la escucha y de vez en cuando asiente ¿con aire aburrido? Pensé estarían charlando como cualquier par de enamorados, creando sus castillos en el aire, pero no es así, ella le cuenta historias familiares, hasta me parece interesante, su charla, no intenta justificarse, sólo expone de una forma un tanto impersonal, su alejamiento con su familia, habla de sus orígenes, a veces se le hace un nudo en la garganta y un leve cambio en su tono, indica dolor, rencor; no creo que el tipo que la acompaña, lo percibiera siquiera, eso sólo oídos entrenados lo detectan. Ella necesita un abrazo, empatía, que su compañero sólo comprenda, no le dé soluciones, tal vez sólo necesita ese breve contacto humano donde se transmite un “todo va a estar bien”.

Enciendo  nuevamente un cigarrillo. Sé por experiencia cuanto molesta  hoy en día a las personas, este hábito de nosotros los fumadores. Me preguntan ¿porque fumo? Los momentos más agradables y nostálgicos de mi vida, los he disfrutado con una taza de café y un cigarrillo entre los dedos. Es algo que quien no fuma jamás entenderá. Sonrío, apuesto que la dama en cuestión, sea de esas nuevas generaciones,  tan en boga, orgánicas y ecologistas, defensora de causas ambientales, aburridamente vegetariana, no beberá, ni fumará, su atuendo la delata, huaraches Oaxaqueños, viste de blanco, ropa de manta, un collar artesanal con una piedra muy singular en forma de dije, unos aretes hechos de granos de café, por cierto me encantarón, su melena enmarañada al viento, sin adornos superfluos, es del tipo de personas que llaman la atención, sin ser hermosas, sólo tienen algo que hace voltear a verlas. Exhalo una voluta de humo groseramente hacía ellos y cierro los ojos un momento mientras aspiro el humo del cigarrillo. Y divago.
Pienso como desde una banca se piensa, se contempla la metamorfosis del mundo que nos rodea donde sólo somos espectadores, donde el gran teatro del mundo continua. En una banca uno se sincera. Estática, una banca transforma a quién se sienta en ella: alienta los pies cansados del viajero, la ternura de los novios, acoge el nacimiento de la pasión, una palabra inquietante, enciende los pensamientos de un lector.

De pronto llega un olor a tabaco fuerte, tabaco cubano, lo reconozco cuando lo huelo. Continuo con los ojos cerrados y el hilo de mis pensamientos se pierde. Evoco momentos, recuerdos, de otros tiempos ya tan lejanos que me hacen temer que se diluyan  de tanto que los pienso. Me veo fumando ese mismo tabaco, en una casa cerca del mar, hubo un tiempo de risas y besos compartidos, caminar por la playa descalzos, juguetear en la arena, cuerpos sudorosos, agitados, fundiéndose, en un sublime acto de amor, suspiros exhalados al viento, cuando nos encontrábamos se quemaba más despacio la soledad en la tierra. No fue una historia larga, ni siquiera una hermosa historia, tan solo fue un breve lapso de tiempo. Hoy son, sólo anhelos convertidos en deseos, colmados de añoranza.

Ese olor continua inundando el ambiente.¡Es ella la que fuma!, ¿Pero cómo es posible? Eso no encaja en el perfil, que hice hace unos momentos, se me escapa una media carcajada, creo estoy perdiendo el toque.  Así que pequeña dama, ¿Este es sólo un disfraz que usas para los paseos dominicales? ¿Cómo serás realmente fuera del disfraz? ¿Oficinista? No, no me la imagino, ¿Empleada de alguna tienda de esas esotéricas? Oh si, encajaría. La veo leyendome las cartas del tarot o haciendo mi carta astral. Rodeada de incienso y otros artilugios. Río abiertamente y la observo sin la más mínima discreción, si mi madre me viera y yo fuera un crío me regañaría diciéndome: "Enrique es de muy mala educación mirar a las personas fijamente cuando no las conoces".

Cigarros Cohiba, no he visto tan frecuentemente mujeres que fumen esa marca y ese tipo de cigarrillos, bueno, si lo he visto en algún sofocante tugurio, en algunas ciudades de las costas hay mujeres de no muy buena reputación, que gustan de un aguardiente local acompañarlo con esos cigarrillos de sabor fuerte como diríamos "para hombres" tabaco negro, de un olor exquisitamente rico y distintivo. Si le hubiera puesto un cigarrillo mentalmente en las manos hubiese sido un mentholado.

Más intrigado seguí observándola, dar largas bocanadas, su mirada por instantes se perdía y hacía pausas en su relato, como pensándose mejor que desnudar y que no, tal vez el tipo no merecía toda su franqueza. Hay personas que no merecemos lo que se nos regala y la confianza es una de ellas. 

Sintió mi mirada y nuestros ojos se encontraron, por breves y eternos instantes, sostuvimos la mirada, con interés, desafío y algo de asombro, emoción, como quien se descubre por primera vez, había también algo más, como si nos leyéramos el alma, nos perdimos en la inmensidad de lo profundo de nuestros ojos negros. Es imposible pero nos tragamos.

Confuso desvié la mirada, ¿que había sucedido en ese lapso incierto de tiempo? ¿fueron segundos solamente o largos minutos? ¿su novio se dio cuenta? No me importa el tiempo, no me importa el tipo en cuestión, lo que me atenazaba era ¿que tipo de conexión hubo entre nosotros y porque? Sólo somos unos completos desconocidos perdidos hasta ahora, sentados en una banca muy singular, una banca que me atrajo y me llevo a coincidir con ella en tiempo y lugar.

Deseaba, ¡no! más que desear, necesitaba cruzar palabras con ella, no podía dejarla ir sin siquiera saber si volvería a verla, si nuestros caminos volverían a cruzarse. Busque indicios de algo que me llevará a encontrarla,  había un libro entre ellos.El título: Demian de Herman Hesse (uno de mis favoritos por cierto), un bolso abierto donde asomaban los cigarrillos, y una agenda elegante. Era todo lo que podía ver.

No daban indicios de que se irían pronto, eso me daba tiempo. Solté el aire contenido, ni siquiera me había dado cuenta de mi modo aprehensivo. Podría seguir escuchando furtivamente la charla y saber algo de ella.

Me levante de la banca y cruce la calle hacía un establecimiento de café tipo Francés, con mesas en la acera, pequeños floreritos como centros de mesa con rosas rojas invitando a la charla romántica y velas que se encenderían una vez caída la tarde, sombrillas coloridas protegiendo del sol a los comensales y con vitrinas exhibiendo todo tipo de panecillos y pasteles exquisitamente decorados. Por un momento se me antojo estar ahí sentados la desconocida y yo charlando más cómodamente. Aleje ese pensamiento, no era mi momento. Compre un café, otra caja de cigarrillos, queme unos minutos extras mirando cualquier cosa en las vitrinas del café y regrese lentamente hacía la banca. Ella me observo todo el trayecto hasta que me volví a sentar, muy casual e hice lo que la mayoría de los jóvenes hoy disfruta con tanto ahínco sacar el móvil y perderse horas navegando o chateando con sus amigos, fingí ensimismarme con el mio. Mientras la escuchaba continuar con su relato, terminó la historia de su familia que narraba. Su acompañante emitió algunas opiniones que a mi parecer eran comentarios sosos y estúpidos como de aquel que no le importa en mayor medida los problemas ajenos o entender el porque ella se abría así con el, ¡era un perfecto imbécil! No entendía como hay mujeres que les gusta rodearse de tipos así, era obeso, poco agraciado, con una indumentaria deslucida, algo desaliñado. De pronto ella pidió algo, el se incorporó y solícito fue a comprarlo, ella le entrego dinero de su bolso y le dijo, "si quieres compra también uno para ti". Él contesto con un "no gracias" ¡Vaya! ¿ni siquiera el podía cortesmente invitarselo? ¡¿que tipo de galán traía por Dios?!. Era el momento que esperaba, me dirigí a ella y le pedí su encendedor, simulando que el mio tenía una falla y no encendía más; busco en su bolso y como muchas mujeres, lo guarda dentro de la misma cajetilla, le hice un comentario referente a sus cigarrillos:

_No es común que vea a una mujer fumado esa marca en especial.
Soltó una risa y dijo:
_No, no es usual, pero a veces me lo permito.
_Es un sabor muy fuerte, ¿te gusta?
_Tanto como el café_  He hizo un ademán hacía el mio.
_¿Puedo invitarte uno?
_Gracias, pero ya me traerán uno
_¡Oh, perdón!, ¡cierto! tu novio fue por uno ¿no?
_No es mi novio y sí le encargue uno, el olor del tuyo me hizo querer uno_Y sonrió, tenía una sonrisa bella y sincera, me recordó a un niña, una sonrisa tierna y picaresca, se le marcaron unos hoyuelos en las mejillas. Y su rostro se ruborizo. Hacía tiempo que no veía a una mujer sonrojarse de forma tan natural.

_Deduzco por tu expresión que aunque no es tu novio, son algo más ¿no?_se lo solté, ya me había dado más información de la que esperaba pero deseaba saber todo lo posible, antes que llegará el tipo en cuestión y nos interrumpiera.
_Hamm, pues si, pero es complicado, somos algo, y a la vez nada, digamos amigos que comparten momentos en una relación bizarra_Desvió la mirada hacía el establecimiento de enfrente, como esperando que él no estuviera espiándonos.
_Vale, no te estoy interrogando, sería muy descortés de mi parte, siendo unos completos extraños ¿no?.Sin conocernos siquiera_Tire el anzuelo, espere su respuesta, pero ella lo esquivo_Retomando la pregunta inicial, hablábamos de tus cigarrillos...
_Vale... mis cigarrillos porque te causan tanta curiosidad?.
_No es tanto curiosidad, ok, me has pillado_sonreí como un niño que lo han agarrado en la mentira_ Si es curiosidad. Te confesaré algo, tenía los ojos cerrados y percibí el aroma y trajo a mi mente momentos y recuerdos. Por un instante me transporte a otros tiempos y lugares.

Sorprendida abrió más sus grandes ojos, eran negros, muy expresivos, enmarcados por unas largas pestañas. Unos ojos atrayentes de mirar profundo.
_Me sucede lo mismo, pienso en mi padre, el fumaba habanos cubanos, me recuerda el mar, el olor a sal, la arena de la playa, un cafecito antigüo en una callejuela escondida, un trovador cantando coplas, me recuerda un danzón, ¿has escuchado  el danzón Nereidas? Mi padre lo adoraba._Un suspiro involuntario se le escapo de sus delgados labios.
_Conozco ese danzón, ¿no eres cubana ¿verdad?_solté otra pregunta, por sus respuestas tan francas y abiertas, deducía que era una persona muy extrovertida, con facilidad para sociabilizar y con don de gentes. Una persona que encajaría en cualquier lugar, y con habilidad para mantener una charla por horas.
Me intrigaba más, por lo que había dicho, extrañaba a su padre, hablaba de él en pasado, tenía raíces cubanas o de algún lugar en la costa, menciono el mar y el danzón, le gustaba el café, tal vez el son o la trova. Seguí hilando.
_¡No por diosa! ¿lo parezco?_ reía abiertamente, con una expresión coqueta. ¿Esperaría un halago?

No pude responderle, se acerco el tipo, sin darnos cuenta ya estaba a su lado ofreciéndole el café y mirándome de soslayo con una mirada hosca.

_Ten, sólo había cortado, con leche normal.
Ella hizo un mohín y levanto los hombros.
_Lo hubieras pedido expresso, sabes que me caerá mal
_Se me olvido, tomatelo así.
Curioso pregunte
_¿Te hace daño el café?
_No. Es por la leche, soy intolerante.
Él se nos quedo viendo, lanzando una pregunta muda. "¿Por que te metes en nuestra charla?" "¿Se conocen?"
_¡Oh por cierto! Carlos te presento a un desconocido que le llamo mucho la atención mi particular gusto por los Cohiba, y con el cual charlaba de ello.
_Desconocido _ sonriéndome_ te presento a Carlos.
Reí, no pude evitarlo, era sagaz y sutil, ahora ella conocería primero mi nombre y sin siquiera preguntármelo.
_Mucho gusto Carlos, soy Enrique para servirós_ Me levante de mi asiento en el acto y extendí la palma en un gesto cortés.
Carlos sólo meneo la cabeza, a modo de saludo, sin siquiera extender la mano para corresponder la mía. Haciendo gala de su educación. Y sólo expreso un cortante "hola". Como lo venía diciendo, un tipo, que no encajaba con ella, de gesto adusto y sin la mínima intención de integrarse, se volvió hacía ella  y le dijo: "¿nos vamos?" ¡Vaya cortesía!
Ella sabía mi nombre y yo aún no había podido saber el suyo, si se iba en ese momento quedaría como al principio, ¡vaya estúpido que había sido!, me deje llevar por su charla amena y no hice las preguntas precisas y adecuadas, perdí mi oportunidad. Me maldije interiormente, ahora estaba en sus manos.
_No, ¿por que? además sería grosero de nuestra parte, pensará Enrique_ y me miró_ que nos ha molestado.
Perfecto, eso me daba más tiempo.No lo desaprovecharía.
_No, jamás importunaría; además yo sólo quería un encendedor ¿lo recuerdas?. No los molesto más, muchas gracias desconocida dama._Extendí la mano, e hice un ademán de irme y le sonreí como esperando devolviera el gesto.
_¡Touché!_contesto ella y se carcajeo. Mientras Carlos muy serio nos observaba. Molestandole esa camaradería inusual entre dos desconocidos, o la confianza que se palpaba como si fuésemos amigos de años. Y que habíamos logrado en escasos minutos.
_Muy bien caballero, lo merezco, por descortés_ Extendió su mano y estrecho la mía_Mi nombre es Sarah.
Tenía manos suaves, fue breve el contacto. Al menos ya sabía su nombre: Sarah, un bello nombre.
_Y no nos molestas, ¿verdad Carlos?_ Volteo a verlo con una sonrisa gélida y retándolo a que le contradijese.
_ Siéntate por favor, acompáñanos y platícanos que haces por aquí.
Me volví a sentar a pesar de la mirada de Carlos que me decía todo lo contrario, se leía un "largate y deja de flirtear con mi mujer"
_Pues.. deambule y me encontré aquí, no se como, mis pasos me guiaron a está calle y entre a ese museo, deberían de visitarlo tiene una exposición rara pero interesante_ Señale el viejo edificio junto al café, de donde momentos antes había salido.
_ Ya lo visitamos unas horas atrás. Carlos quiso ver esa exposición cuando caminamos también por aquí, al igual que tú no traíamos plan, llegamos a este lugar y empezamos a andar, rodeamos la plaza y descubrimos ese museo, ni siquiera sabía que existía. La exposición tiene elementos rescatables, por lo demás me pareció algo extenuante, demasiado yuxtapuesta.
_¿No la entendiste?_le pregunte 
_Tal vez no, aunque me gustó la propuesta "Hay que vivir a morir" del primer piso, el que correspondía al infierno.
_ ¿Notaste la correspondencia de los tres pisos en que está montada la exposición con los círculos dantescos? _Exclame sorprendido.
_Pues si se notaba algo, la curaduría de la planta baja decía en algunas de las paredes "Es el infierno, pero hay salidas de luz. Si el arte está enfermo, vamos a curarlo". El siguiente piso está concebido como purgatorio, en el que recordaba lo cotidiano amado,cuando vivimos en pareja donde hay momentos felices, momentos insólitos que aderezan nuestro día a día pero también hay peleas, confrontación. Los infiernos que todos hemos vivido a consecuencia de la salud y la enfermedad. de la carencia, de la perdida de emociones y victimas de la cotidianidad_Terminó y su voz sonó apagada, triste con eso último.

Pareciese que extrapolaba el tema de la exposición hacía cuestiones más personales.

_¿Y a tí que te pareció _Pregunta dirigida a Carlos con un poco de malicia, como queriendo saber hasta donde llegaba su percepción o su conocimiento.
Carlos levanto los hombros:
 _Algo friki, extravagante con el concepto de los siameses enfermos, heridos y curados con su arte kitsch.
_Creo que tampoco a ustedes les convenció del todo ¿verdad?_ afirme más que preguntarles._Coincido, que hay muchas exposiciones de arte contemporáneo que son difíciles de digerir, entender y más cuando previamente no explican el concepto, cuando uno deambula por las salas preguntándose de que va, o que quieren decir o expresar los artistas. No me ufanaré de haberlo entendido, sólo me llamo la atención ciertos y particulares detalles, como decías Sarah hay elementos rescatables por lo demás también te doy la razón a veces sentía que estaba un tanto sobrecargada con tantos elementos sobreponiendose unos a otros. Por ello mejor termine rápido la exposición y me salí a disfrutar otras esculturas_Y lo dije posando una mano sobre la banca donde nos encontrábamos sentados.

Sarah sonrió y dijo:
_Prefiero el arte más clásico o ya no soy tan joven para entender las nuevas corrientes, por ejemplo a mi me apasionan más y disfruto más a los artistas de la vieja escuela. Es como estas bancas; dispersas por la ciudad, cruelmente anónimas, sin una placa identificatoria para que el transeúnte que pasa de largo, sin prestar atención, sin detenerse a mirar o a tomar asiento, conociera quien las realizó y poder admirarse de estas bancas de formas inusuales, que se fusionan con el paisaje urbano, invitandoles a descansar, a tomarse unos minutos para observarlas, tomarles fotografías.Vivir las esculturas de otra manera, más allá de las vitrinas de los museos donde es impensable poder tocar una obra de arte. Como está de Leonora Carrington donde no sólo la fotografías a lo lejos. Aquí la palpas, te sientas, puedes recostarse, hacer de ella un recuerdo de charlas con amigos.

Dios de mi vida, me dejo perplejo. Enmudecí. No podía articular palabra. Ella conocía esta banca, sabia lo que yo solo sospechaba, que era una obra de arte de Leonora y momentos antes yo los tachaba de un par de ignorantes que ni siquiera imaginaban donde estaban posados.
Y nuevamente me dejaba en menos de diez minutos estupefacto y atónito.

Sarah continuó, probablemente pensó que sabía de lo que hablaba, así que procedió a seguir explicando.
_Sólo es posible ubicarlas por la originalidad del diseño. Para el caminante, deseoso de recorrer la ciudad, puede ser una invitación a convertirse en aventurero descubridor de piezas de arte que juegan a ser asientos. Estas bancas que ahora están dispersas por las calles del centro histórico formaron alguna vez parte de una exposición llamada "Dialogo con bancas" y estuvieron todas ellas sobre Reforma, eran una atracción turística que lamente mucho cuando las quitaron y  dispersaron de ese lugar que era el marco ideal para ellas. Esta valiosa escultura por ejemplo se llama "Ya no hay lugar", Sin embargo, la gente va y viene sin detenerse a observarla. Seis rostros de magos juegan a ser banca: un truco de mobiliario urbano o surrealismo.

_¿Y porque estás tan segura de que está banca es obra de Leonora?_ Hice la pregunta con suspicacia, todavía quería poner a prueba su conocimiento, aunque yo ya sabía la respuesta.
_Por su firma acá atrás_ Sonrió como una niña que conoce un secreto y de rodillas sobre la banca, se inclinó por el respaldo y me señalo donde ella afirmaba que estaba la firma del autor. No pude aguantar más me incorpore y di la vuelta a la banca; me acuclille donde ella señalaba. Pase mi mano por la firma. Sonreí ampliamente, la mire y nuestras sonrisas fueron cómplices por el hallazgo.

_Nunca pensé que tú conocieras la obra de Leonora, o siquiera supieras donde te encontrabas sentada_Esto último se me zafo sin poder evitarlo.
_ ¡Ah! ¿Así que dictaminaste que era una ignorante? ¿no?. Pues se ha llevado una sorpresa señor versado en las artes y conocedor o una desilusión al haber errado en su análisis?_  Terminó con un tono mordaz, irónico y un brillo de rabia en sus ojos.

Debí pensar mejor lo que decía, me reproche, el hecho de externar lo que había pensado horas antes cuando los descubrí en la banca y en este momento presa de la emoción haberlo mencionado, fue motivo de que ella se pusiera a la defensiva, como si ya estuviera acostumbrada a que la gente la clasificara de inculta. Creo que toque una fibra sensible.

_Me disculpo, por como debió sonar ese comentario. Nunca fue mi intención insinuar que fueras una persona ignorante. Sólo que como tu misma lo dijiste antes, ¿cuantas personas pasan de largo y no imaginan siquiera que hay obras de arte de excepcionales y renombrados artistas convertidas en mobiliario urbano?. Tu coincides también que estamos acostumbrados a ver este tipo de arte detrás de vitrinas en museos y nunca jamas se nos permite tocarlos_ Esperaba que esto mitigara un poco mi imperdonable comentario anterior y ella quedara satisfecha con la explicación.

_Así que tú Enrique, ¿si conocías está escultura y por ello tú interés desde que llegaste? Sí lo note, como la examinabas atentamente y como tú mano acaricio la banca_ Aunque parezca distraída, hay veces que ciertos detalles captan mi atención. Y dime ¿deseaste que no estuviéramos aquí sentados para poder buscar la firma del autor sin que la gente te tachara de loco?_ Seguía un poco a la defensiva, y además parecía que leyera mi mente, todo lo que pensé antes ella lo intuía o lo adivinaba. 

Carlos sonreía socarronamente, disfrutando que ella estuviese ahora molesta u ofendida por mi imperdonable error y que me tachara de presuntuoso y petulante. Para él sería mejor que ahora le cayera mal a seguir con la camadería de momentos antes, como sí fuésemos amigos.

_Te confieso que si tuve la urgencia de buscar la firma para corroborar mis sospechas, pero me contuve, por respeto hacía las personas que se encontraban sentadas o tomandose fotos. Decidí regresar otro día y verla con más calma._Mentí. Preferiblemente, a seguir tratando de compensar mi error. Y tal vez equivocarme o proseguir dando una mala impresión, tenía que ganar el terreno perdido.
_Tál vez ustedes también visitarón la exposición: “Leonora Carrington en la Ciudad de México". Donde se mostró parte de su obra compuesta por grabados, pintura y escultura. Y ahí estaba está banca y otras piezas más. Fue creo en el año 2008.

_Sí la visitamos estuvo genial, ¿verdad nena?  _Carlos al mismo tiempo que hacía el comentario poso su mano en el hombro de Sarah y prosiguió:
_Se tomo miles de fotos en las bancas, ¡se subía a todas!
Sarah lo interrumpió:
_La exposición que Enrique menciona es otra y la que tú dices donde me tome "miles"_ (lo dijo con tono sarcastico)_ de fotos es la de "Dialogo con bancas" 
Carlos prosiguió dándole poca importancia a su error:
_Ella admira a Leonora y  también a Remedios Varo, ¿la conoces?
Asentí mientras el seguía con su perorata...
_Cuando hay exposiciones, siempre se entusiasma igual que una niña y la llevo a verlas_terminó con un tono de macho territorial ostentoso. Me causo risa. No tenía nada que demostrar.
Ella se volvió un poco desconcertada, le lanzó una mirada indescifrable, tal vez como si no estuviera acostumbrada a ese tipo de demostraciones de cariño en publico o el mintiera y nunca la acompaño y ahora quería dar la apariencia de amante atento en cumplir cualquier deseo o capricho de su dama.

_Si también admiro la obra de varios surrealistas_ Le conteste su pregunta a Carlos_ Entre ellos Dalí, Bretón y por supuesto Varo. De hecho a su muerte se pronunció en diversos medios escritos el adiós a la última surrealista. Ya lo decía Octavio Paz "Leonora Carrington no era una poeta sino un poema que camina, que sonríe, que de repente abre una sonrisa que se convierte en un pájaro".
_ Sarah si leíste la entrevista que se le hizo al pintor y escultor Leonardo Nierman, donde aseguró que la muerte de Leonora Carrington “es una pérdida de impacto mundial”. Explicó que ella fue una pieza muy importante en un momento de gran creatividad de la pintura del siglo XX: el surrealismo. Explicó que el surrealismo abrió puertas de libertad a toda una generación de pintores y su biografía es una novela desde su relación con Max Ernst –otro de los gigantes de esta corriente artística– que definitivamente marcó su paso por la historia de la pintura como personaje.

_Si Enrique, leí varios periódicos y noticias al respecto. Lamento que se le haya terminado el tiempo. Leonora  y Remedios fueron mis dos favoritas porque se encargaron de inventar nuevos mundos, encarnaciones del inconsciente y eso no es fácil hoy en día. Recuerdo una frase de ella que me gusta mucho citar: “¿El mundo que pinto? No sé si lo invento, yo creo que más bien es ese mundo el que me inventó a mí”

Se hizo un silencio cómodo como si cada uno se perdiera en sus propios pensamientos, dando unos segundos de silencio a la memoria de Leonora, tan sólo roto por el imbécil de Carlos

_Llegaremos tarde, a menos que ya no te apetezca ir...O prefieras posponerlo para otro día, pero recuerda que saldré de viaje y después ya no tendremos tiempo_ soltó Carlos con tono de advertencia

Sarah salió del trance en que estaba y dudo un momento, entre quedarse y seguir charlando conmigo o ir a donde le recordaba Carlos, Yo no lo sabía, no tenía forma de saberlo en este instante, ¡No leía mentes por Dios! Y en esos momentos los apetitos e impulsos del deseo ganaron en su elección y yo perdí. Carlos había jugado inteligentemente sus cartas y yo desconocía el juego.
Sarah se incorporó y se despidió:
_Un enorme gusto conocerte Enrique, tu charla es muy interesante, coincidimos en gustos por el arte e imagino que si hablamos de libros también tendremos puntos en común, pero el tiempo nos juega una mala pasada, espero encontrarnos en alguna exposición de Leonora o Remedios algún día._ Extendió su mano y se la estreche con cierta emoción y desilusión por el lapso tan breve que compartimos que hubiese querido alargar más, pero no tuve la sagacidad de salvar ese obstáculo, así que sólo atine a asentír y la mire por ultima vez a los ojos. En los míos se leía un: ¡quedate!
_Adios Sarah...el gusto créeme fue mio.
Sarah desvió la mirada, retiro su mano que aún retenía entre la mía. Carlos sólo hizo otro ademan con la cabeza a manera de despedida, con una sonrisa de triunfo la tomo del brazo y se fueron caminando por la calle solitaria. El sol poniente caía sobre sus siluetas y sus sombras se fueron extinguiendo hasta que desaparecieron del horizonte.
Prendí un cigarrillo, suspire y vino a mi mente una canción de Silvio Rodriguez:

"Soy vecino de este mundo por un rato y hoy coincide que también tú estas aquí. Coincidencias tan extrañas de la vida, tantos siglos, tantos mundos, tanto espacio y coincidir."

Fragmento del capítulo 2



Otros fragmentos de la historia:
Cicatrices
Delirios danzando
Prólogo del libro


montse_rocco@hotmail.com



martes, agosto 20, 2013

La 100

CRÓNICAS DE UNA MENTE DAÑADABRUJA

Era impensable llegar a mi entrada número 100, sin hacer alusión al logro, al trabajo arduo, a los momentos donde pensé en dejar de escribir, por diversos motivos: entre situaciones personales, falta de inspiración, sueños rotos, el motor que me hizo escribir ya no era suficiente o al menos ya no me motivaba, ya había superado perdidas, el replantearme nuevos temas que creía no compaginaban con el tema del blog, ya saben usar de catarsis un blog para escribir o llorar las penas, llegará un momento que no podrás explotar más ese tema, o crecerás y dirás ¡al diablo!

Así que entre dudas, fiaca, debo confesar que sí, muchas veces la flojera me invade y dejo temas y escritos que se van acumulando en borradores, en este momento tengo borradores y más borradores aquí y en papel, esperando ser editados, revisados y publicados. Una novela conclusa que por razones que no expondré y agradezco en su momento no haberla publicado (ahora digo ¡uff que bueno!) Ahora tengo que editarla y cambiar perfiles de personajes, en fin esa tarea la seguiré postergando, ni modo, así pasan las cosas y siempre suceden por algo.

Pero lo mejor de todo esto es que también el escribir me ha dejado conocimiento, nuevos amigos con gustos similares, aprendizaje, apoyo y ayuda para seguirlo haciendo, orgullo de poder ver que lo que escribes es aceptado por un público que te sigue, que te visita, que te recomienda y hasta te sorprende uno que otro con propuestas para ya decidirte a publicar (gracias a tí, sabes que no he descartado tu propuesta, sólo necesito más confianza en mi, valor para hacerlo, y que no te canses de esperar a una indecisa que aún cree que no es tan bueno lo que tiene, te agradezco el voto de confianza y que más puedo decirte tú sabes...)

También hay que reconocer que no todo el merito es mio, hay mucho de lo que he publicado que es autoría de otros bloggeros, de otras páginas o de diversos autores, en su momento he dado sus créditos, o he referenciado la autoría o la fuente, de donde he tomado la publicación pues me ha parecido tan interesante que he querido replicarla en mi blog para difundirla. Gracias a esos escritores o creadores por escribir tan bellos poemas, pensamientos, reflexiones, investigaciones, curiosidades o notas. Mi agradecimiento y admiración.

Ha sido gratamente sorprendente ver que ciertos temas o blog´s han sido de los más leídos, temas que en su momento nunca pensé que tuvieran tanta aceptación, o visitas. El ranking va así:

"Siempre tendremos Café (Frases y citas de café) con 15765 vistas
"La Llorona" con 3401 vistas
"Horóscopo Sexual" con 2398 vistas
"Remedios Varo, 5 Llaves" con 2097 vistas
"Amate y Papiro un diálogo histórico" con 932 vistas
"22 de Julio no se olvida" con 703 vistas

Temas tan variados que he ido publicando, he hablado de mucho y poco de mi vida, mis experiencias, de lo que me gusta, de lo que veo, leo, visito, me sorprende o lo que deseo que ustedes también conozcan y les emocione tanto como a mi.

Seguiré intentando que esto sea un medio de difusión, un modo de acercarnos a temas variados y de abordar otros temas que aún no he tratado, pero en su momento también llegarán.

 Agradezco enormemente a todos los que con su apoyo han hecho de este lugar lo que hoy es, de permitirme celebrar hoy mi entrada número ¡100! Por sus visitas, por la gente de países impensables que nunca hubiera imaginado que me leerían. Por los comentarios dejados, que aunque sé son pocos, en estos lugares, el tener uno ya es una señal de que alguien te lee, o le gusta lo que escribes, gracias por tomarse el tiempo, para hacerlo.

¿Como me inicie? Empece escribiendo en otras dos plataformas space de msn y luego me mude a myspace, de ambos lugares sólo queda el recuerdo, el primero murio, del segundo me fui, ya no era satisfactorio para mi. Hoy está es mi casa y espero lo siga siendo por mucho tiempo. Espero seguir creciendo junto a ustedes amigos lectores, seguir retroalimentandome, y seguirme renovando.

¡Los bloggeros no seríamos nada sin un lector, así que festejemos juntos y por ustedes y gracias a ustedes: mi post número 100!

¡Sin ustedes mis sueños salvajes y mis crónicas de una mente dañada no hubiesen visto la luz!

Te agradezco este precioso momento de tu tiempo que me dedicaste,
A ti que estás leyendo esto y a toda la gente que pasará sin dejar rastro...

Con amor: Montse Rocco
P.D. ¡Ah! y también gracias por alimentar a kahve la mascota del blog, nunca está satisfecho (dale un clik , ¡bueno no! dale muchos ¡es adictivo!)



montse_rocco@hotmail.com

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...